La nave espacial Messenger, de la NASA, está a punto de estrellarse contra Mercurio, el planeta que ha estado estudiando desde hace poco más de seis años; fue lanzada en 2010 y luego de seis años y medio de viaje accedió a la órbita del planeta más cercano al Sol de nuestro sistema solar.
Luego de llevar a cabo una extensa y exitosa misión, que ha recabado información que los científicos estudiarán por años, Messenger se quedará pronto sin combustible y chocará contra la superficie de Mercurio a 14.087 kilómetros por hora; la colisión tendrá lugar, en algún momento de mañana o pasado mañana, del lado opuesto a la Tierra, por lo que no podrá ser vista desde aquí. En su despedida, los científicos destacan que “Por primera vez en la historia tenemos un conocimiento real sobre el planeta Mercurio, que demuestra que es un mundo fascinante ". El último movimiento de Messenger lo realizó el pasado viernes y “después de esta última maniobra, finalmente declararemos que la nave espacial ya no tiene propulsor ya que la misma reducirá casi todo nuestro remanente de gas helio", tal como lo explicó el ingeniero en sistemas de la misión, Daniel O'Shaughnessy. "En ese punto, la nave espacial ya no será capaz de luchar contra la atracción de la gravedad del sol".
Fuente: CNN